miércoles, 21 de septiembre de 2011

Esss una cosssa de locosss, nene!!!

No hay duda de que Héctor Rodolfo Veira, alias “El Bambino”, se ha convertido en uno de los personajes más graciosos del ambiente deportivo y de la televisión. Sus anécdotas como jugador y director técnico y sus intervenciones como comentarista de fútbol (y también de cine) son desopilantes e ingeniosas.

Aquí van algunas de las frases más festejadas (el resto está aquí):

Por la Copa Libertadores ‘88, a San Lorenzo le toca jugar de visitante contra el Filanbanco de Ecuador con 50 grados de sensación térmica. El arquero Pogany cuenta que perdían 1 a 0 y ya no les daban las piernas para seguir corriendo. En el entretiempo estaban todos en el piso y se tiraban baldazos de agua con hielo para refrescarse, pero no lo veían al Bambi por ningún lado. En eso se abre una puerta y aparece el DT... ¡¡con un sobretodo!! “El calor es psssicológico, muchachosss!!! Vamos que lo ganamosss!!!”, les arengó a sus jugadores. Al final ganaron 2 a 1. Un motivador terrible.

“Yo jugaba para la Universidad de Chile y ese día había ido al banco...”, contaba el Bambi. “...Tenía la gamba hinchadísima y el clima era de locos. ¡¡Unnn friiiio!! Además estaba todo embarrado y mojado, una barbaridá... El equipo venía complicado, hasta que el entrenador, Lucho Ibarra, me dice ‘Bambino... calentá’... y yo asomé la cabecita por afuera del banco y le dije ‘¿Te parece, Luchito? Mirá que el 10 la essstá rompiendo, ¿eh?’”.

El Bambino cuenta siempre que hizo de extra en varios films. Su participación más conocida fue en “Big Jake”, un western protagonizado por John Wayne. En una concentración en México, la casualidad quiso que justo les tocara compartir hotel con este famosísimo actor norteamericano. “Acompañame que te voy a presentar a John Wayne”, le dijo orgulloso al Toscano Rendo. El Bambi le tocó la puerta de la habitación y el tipo se la cerró en la cara dos veces, ante un Toscano decepcionado. “Lo que pasa es que me conoce vestido de indio, así de civil no me tiene”, trató de explicarle.

“¡Zandoná! ¡¡¡Andá a abrazarrrte con ellosss!!!”, gritó el Bambi luego de un error del “Chino” que terminó en gol de los rivales.

“Nene, a vosss te patean un colchón y te lo embocan en un ángulo”, le dijo una vez en un entrenamiento al venezolano Gilberto Angelucci, arquero del Ciclón en los años ‘95 y ‘96.

“La situación en el club era mala y el lugar para entrenar, un desassstre...”, contaba Veira. “...Voy a buscar una pelota y me salen dos víboras de unos yuyos. Una bar-ba-ri-dá, ¿viste? Llamo al club: ‘¡Acá no se puede entrenar! Te acepto que no haya pelotas, que no haya arcos... pero ¿¿¿dos víboras???’, les digo. Y me contestan: ‘Tranqui Bamba que essstán amaessstradas’”.

“Entiendo la crisis del club, pero pedí un cuatro y me trajeron un pomelo”, declaró Veira quejándose de la dirigencia.

Trabajando como DT de San Lorenzo, en un partido lo cambia a Javier Arbarello por otro jugador. Al salir, el “Perro” le pregunta sorprendido: “¿Por qué me sacaste, Bambi?”. El Bamba le responde: “Me tenés que preguntar por qué te puse, nene”.

“Acá lo asaltaron a Rambo”, comentó una vez refiriéndose a los famosos y complicados “alrededores” de la cancha de San Lorenzo.

El Bambi también fue técnico de la Selección de Bolivia. En un partido la estaban pasando muy mal; los rivales se venían con todo y no había esquema defensivo capaz de pararlos. “Tapé el arco con un colectivo y la pelota entraba por las ventanillas”, declaró resignado al finalizar el encuentro.

“Resssulta que había ido a ver una película de sussspenso...”, contaba el Bambi. “...se trataba de un asesino serial que iba matando a uno por uno con un cuchillo. La escena final era terrrrible; el asesino se iba acercando a su última víctima y la cámara hacía un primer plano del cuchillo y luego le enfocaba los pies... ¡¡el tipo calzaba como 74!! Una cosssa de locosss. Mostraban el cuchillo y luego los pies. Mostraban el cuchillo y luego los pies. Y así unas cuantas veces. En eso se ve que la está por ensssartar y yo me paró de la butaca y le grito: ‘no la matésss, ¡¡¡¡pisaaaala!!!!’”.

miércoles, 14 de septiembre de 2011

Encuesta Nacional

¿Cuál pensás que va a ser el próximo personaje al que la simpática muchachada nac & pop relacione con la Dictadura? Votá acá mismo o desde tu celular mandando un SMS al “asterisco-678”. ¿Los premios? Una cena íntima con Barone y tu biografía escrita por la Russo.
Opción 1: Hijitus, íntimo del Comisario de Trulalá durante los “años de plomo”.
Opción 2: Isidoro Cañones, sobrino de un coronel.
Opción 3: El Capitán Piluso. Coquito vestido de marino tampoco se salva.
Opción 4: El Soldado Chamamé.
Opción 5: El pasaje Tres Sargentos.
Opción 6: El Cabo Corrientes.

lunes, 5 de septiembre de 2011

Mi pasado... ¿me condena?

Desde hace no mucho, se ha instalado en la sociedad argentina una especie de revisionismo histórico y político a partir de una simple pregunta: ¿Cuál fue el comportamiento de determinados personajes públicos durante la Dictadura? Es decir, un delicado interrogante destinado a investigar si han sido colaboracionistas, chupamedias, tibios, alcahuetes o amantes de algún genocida. Esta cruzada moralista y justiciera sería auténtica, siempre y cuando se pusiera la lupa sobre absolutamente todas las figuras públicas y no solamente sobre aquellas que pertenecen al club de los que molestan al Gobierno. ¿O acaso alguien sabe qué hicieron los que hoy levantan el dedito acusador? Es fácil también, como hacen otros tantos, opinar y juzgar desde la impunidad que da el haber sido niños o adolescentes durante aquella época nefasta. ¿Y cómo hubieran actuado de haber sido adultos y ocupado lugares destacados dentro del mundo de la política o del espectáculo? Imposible saberlo aunque en ciertos casos no es tan difícil imaginarlo. El miedo, a veces, suele sacar lo peor de cada uno.
En resumen, creo que nadie tiene el culo limpio pero parece ser que algunos nos quieren vender que sí. Y encima pretenden que les creamos. Así son las cosas y ya llegamos al extremo de poner en duda a entrañables personajes como Tato Bores y Carlitos Balá. Es más, con respecto al primero, en el programa “678” el Ministro Randazzo fue a fondo y sin anestesia: “si (personajes como Tato) hubieran tenido otra actitud, no hubiéramos tenido que lamentar 30.000 personas”(1). Sin palabras.

Entonces, estimados muchachos nac & pop, sean medianamente equitativos. Si tanto estupor causa esta foto de abajo donde aparecen sonrientes Alfano y Lacoste...
...también lo debería causar esta otra de Videla y Don Julio, a quien el ex menemista Marcelo Araujo bautizó como “el Kirchner de la FIFA”.
Si les parece un escándalo esta imagen de Mirtha y Astiz...
...también lo es esta otra donde aparece Kirchner y el general Guerrero, ¿no? (el segundo y el tercero empezando desde la derecha)(2).
El tema del Proceso y los infinitos grados de complicidad civil va a ser el cuento de nunca acabar, por lo que, a mi modesto entender, caben dos posibilidades. Una sería arrojar un manto de piedad y que cada cual se haga cargo moralmente de lo que hizo o dejó de hacer. La otra es que directamente los 40 millones nos entreguemos a la Justicia por crímenes de lesa humanidad y le dejemos el sillón de Rivadavia a Amigacho, a Zulma Lobato o a Belén Francese. Digo, de pronto, me parece...

(1) Paradójicamente se contradice con los dichos de la Presidenta, quien meses atrás afirmó que si Tato viviera sería ultra K.
(2) El general Guerrero era el Comandante Militar en la provincia de Santa Cruz y el resto eran civiles que concurrieron a esa reunión para apoyarlo.